Qué son.

Los retardantes son compuestos químicos que incrementan significativamente el punto de ignición de los combustibles tratados con ellos para alcanzar umbrales de temperatura por encima de lo normal. Estos límites varían en función del tipo de aditivo empleado.

Composición y cómo actúan

Existen varios tipos de aditivos retardantes, pudiéndose clasificar en:

-  Retardantes de corto plazo (espumas, viscosantes, geles, etc.). El retardante a corto plazo funciona ralentizando la evaporación del agua. En unas condiciones medias de evaporación en verano, 2/3 del agua fijada subsisten durante 30 minutos. Transcurrida una hora, el agua restante sólo sería 1/3 de la cantidad total. Por tanto, la duración media del retardante a corto plazo sólo será de 30 minutos.

- Retardantes de largo plazo (sales amónicas, tales como el sulfato amónico, el fosfato amónico, pirofosfatos y polifosfatos, incluidas dentro del conjunto de los abonos agrícolas). Funcionan como los retardantes a corto plazo, en la primera etapa de aplicación, hasta que el agua se evapora. Cuando ésta desaparece y se someten a la acción del calor, se descomponen desprendiendo amoníaco (NH3) que tiene marcado carácter reductor, dificultando la combustión que es el proceso opuesto (oxidación), al mismo tiempo que se forma una costra, dificultando la entrada de oxígeno.

Mezclas de aplicación

Los retardantes de largo plazo se diluyen en agua en una relación de entre 1/4 y 1/5 (partes de concentrado / partes de agua en volumen).

Las mezclas se preparan en estaciones de mezcla y carga de aviones, situadas en las pistas de aterrizaje, desde las que operan los medios áereos de ala fija y carga en tierra. Estas estaciones de carga consisten básicamente en una bomba de tipo centrífugo de baja presión y elevado caudal (aproximadamente 1.500 l/min.) cuya función es la de aspirar agua y retardante a la vez que impulsar la mezcla al tanque del avión.

Para ajustar la dosis de retardante sobre el flujo del agua, el operario de la estación dispone de un depósito de retardante calibrado que permite calcular la cantidad correcta de aplicación.

La mezcla final, lista para su aplicación tiene una densidad de 1,08 a 1,10 g/cm3.

Aplicación aérea

- En acción directa: La descarga de retardante debe realizarse justo por delante del fuego paralelo al frente del mismo, procurando que un tercio aproximadamente del ancho de la descarga caiga sobre las llamas. Con ello se pretende bajar la intensidad de las llamas y dejar impregnada de retardante la vegetación inmediata al frente.

- En acción indirecta: Creación de una barrera cortafuegos a una cierta distancia del frente de fuego y cuya situación en el terreno dependerá de la línea de control establecida. Las descargas de los aviones se realizarán inmediatamente una detrás de otra, así un piloto puede ver el resultado de la descarga de su antecesor y apoyar o corregir el defecto si lo ha habido. Las descargas irán solapadas con un índice de solapamiento del 25%.